Un cierre millonario y complejo de Minera Panamá
Este plan, detallado en un cronograma extenso, abarca desde medidas inmediatas de preservación ambiental hasta la elaboración y fiscalización de un cierre final ordenado, proyectado a lo largo de varios años.
El ministro de Comercio e Industrias, Jorge Rivera Staff, reveló que solo proceso de elaboración del plan de cierre podría alcanzar la asombrosa cifra de 1.5 millones de dólares, sin siquiera considerar los gastos de su implementación.
Rivera Staff basó esta estimación en evaluaciones internacionales de clausuras de proyectos similares, advirtiendo que el cierre completo de una mina de la magnitud de Cobre Panamá podría ascender a cientos de millones de dólares a lo largo de varios años.
El Estado panameño acaba de presentar el "Plan de Acción para el Cierre Ordenado y Definitivo de Cobre Panamá", un paso crucial en esta compleja operación.
Este plan, detallado en un cronograma extenso, abarca desde medidas inmediatas de preservación ambiental hasta la elaboración y fiscalización de un cierre final ordenado, proyectado a lo largo de varios años.
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El plan se sustenta en tres estrategias fundamentales: el cierre definitivo y ordenado de la mina, la defensa del Estado en posibles litigios internacionales y la transición sostenible de la minería metálica dentro del PIB nacional.
El cierre ordenado y definitivo, de acuerdo con el plan presentado, involucra una serie de tareas que abarcan desde la preservación ambiental hasta la gestión segura de la infraestructura minera. Además, se detallan auditorías ambientales, técnicas y de garantías financieras para garantizar un proceso íntegro.
El segundo eje se enfoca en la preparación del Plan de Cierre Final Ordenado y Post Cierre (PCFO), con una guía técnica, la formación de un panel de expertos multidisciplinarios y la inclusión de veedurías ciudadanas para supervisar y aprobar el plan.
La estrategia de defensa ante posibles arbitrajes internacionales es otro aspecto crucial, coordinado por varias entidades gubernamentales y con la conformación de una Comisión Legal Consultiva.
Este monumental esfuerzo no solo representa un desafío logístico sino también una oportunidad para demostrar el compromiso de Panamá con la preservación ambiental y la transición hacia una economía sostenible. Sin embargo, conlleva un costo significativo que el país deberá afrontar para asegurar un cierre responsable y seguro de esta importante operación minera.