Velan a las víctimas de la masacre en escuela de Brasil
El gimnasio municipal Arena Suzanno, ubicado en el parque Max Ferrer, a pocas calles de la escuela, acoge los cuerpos de seis de las víctimas fatales.
Cientos de personas acudieron a primera hora de la mañana de este jueves al velatorio colectivo de algunas de las víctimas del tiroteo por parte de dos adolescentes en una escuela pública de una ciudad de Sao Paulo.
La masacre ocurrió el miércoles cuando dos exalumnos abrieron fuego en la escuela pública de secundaria Raúl Brasil y causaron ocho muertos y otra decena de heridos. Los dos asaltantes también fallecieron, aparentemente al cometer suicidio.
El gimnasio municipal Arena Suzanno, ubicado en el parque Max Ferrer, a pocas calles de la escuela, acoge los cuerpos de seis de las víctimas fatales.
Marilena Ferreira (59 años, coordinadora pedagógica) Eliane Regina Oliveira (38 años, inspectora de la escuela) y los estudiantes Kaio Lucas da Costa (17), Claiton Antônio Ribeiro (17), Samuel Melquíades Silva de Oliveira (16) y Caio Oliveira (15) son los fallecidos que descansan en este espacio.
Las otras dos víctimas de la tragedia, el estudiante Douglas Murillo de 16 años y Jorge Antonio de Moraes, de 51, tío de uno de los autores de la masacre y quien fue asesinado por su sobrino antes de que este cometiera el tiroteo en la escuela, prefirieron ceremonias más íntimas, según explicó a Efe una asesora de la Secretaría de Educación de la ciudad.
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Los autores de la masacre, Guilherme Taucci Monteiro, de 17 años, y Luiz Henrique de Castro, de 25, que también fallecieron al suicidarse al final de la masacre, no formaron parte de la ceremonia conjunta.
El pabellón acogió desde primera hora a cientos de personas, que en un silencio casi absoluto pasaron por las cajas descubiertas para dar el último adiós a las víctimas.
Seis ataúdes dispuestos junto a algunas sillas dejan ver el cuerpo de los fallecidos, cuatro de ellos jóvenes alumnos de la escuela, a los que familiares y amigos acarician y dedican sus últimas oraciones.
Catorce coronas dispuestas al fondo honran a las víctimas, donde se pueden leer inscripciones como "Saudades de seus familiares" (nostalgia de sus familiares).
En solidaridad con los fallecidos y sus familiares, el alcalde de Suzano, Rodrigo Ashiuchi y el ministro de Educación, Ricardo Vélez asisten desde primeras horas de este jueves al velatorio.
Asimismo, está prevista la visita del gobernador del estado de Sao Paulo, Joao Doria.
Los allegados podrán pasar por el velatorio hasta las 16.00 horas (19.00 GMT), momento en que se prevé el traslado de los cuerpos hasta el cementerio de Sao Sebastião.
El ayuntamiento de Suzano informó este jueves de la declaración oficial de luto por tres días consecutivos, así como la suspensión hoy y mañana de las clases en todas las escuelas municipales y estatales en memoria a las víctimas.
La alcaldía también comunicó que las labores de atención a familiares y amigos de las víctimas que ya comenzaron ayer con la participación de 150 funcionarios y 80 voluntarios continuarán durante los próximos días para seguir asistiendo a los afectados.
Del mismo modo, hay prevista una reunión de educadores el próximo lunes día 18, cuando se retomen las clases en el municipio, para abordar la recuperación de la rutina en las escuelas después del trauma del que son vulnerables al menos 26.000 alumnos de escuelas municipales de Suzano.
Durante esta reunión, según el ayuntamiento, se planteará cómo concienciar junto a un equipo de psicólogos sobre el combate a la violencia y el acoso escolar, con el fin de restaurar "la cultura de la paz".
La matanza en una escuela atiza debate sobre armas en el Brasil de Bolsonaro
La matanza ocurrida en una escuela ha atizado la polémica sobre la liberación del porte de armas, que el Gobierno del ultraderechista Jair Bolsonaro impulsa con la excusa de que los brasileños puedan ejercer lo que califica de "autodefensa".
Las armas fueron una bandera de campaña del capitán de la reserva del Ejército de cara a las elecciones del año pasado y también fueron las que este miércoles acabaron con la vida a ocho jóvenes de una escuela de la ciudad de Suzano, próxima a Sao Paulo.
Dos exalumnos de esa escuela ingresaron al instituto y dispararon contra funcionarios y jóvenes que estaban en un recreo, asesinaron a ocho y luego uno mató al otro y se suicidó, sin se conozcan aún sus móviles. Antes habían acabado con la vida del tío de uno de ellos.
Bolsonaro lamentó la tragedia, la calificó como "monstruosidad y cobardía sin tamaño" y transmitió sus condolencias a las familias de las víctimas, sin hacer ninguna alusión a sus propuestas de armar a los ciudadanos para que puedan defenderse de una violencia que cada año causa en el país unas 60.000 muertes.
Sin embargo, sí lo hicieron algunos parlamentarios de la base que respalda al Gobierno, muchos integrados en la llamada "bancada de la bala", un grupo suprapartidario que defiende los intereses de los fabricantes de armas y apoya la promoción de la "autodefensa".
Uno de ellos es el senador Sergio Olimpio, jefe del grupo del oficialista Partido Social Liberal (PSL) en la Cámara Alta, quien dijo que si hubiera habido "profesores o funcionarios" armados en la escuela la tragedia podría haber sido evitada.
"Si hubiera un ciudadano con un arma regular en la escuela, algún profesor, empleado, un policía trabajando allá, se habría minimizado la tragedia", declaró Olimpio, que es mayor de la Policía Militar.
También instó a los parlamentarios a "no permitir que alguien se valga de esta tragedia para decir que el desarme es la solución", lo que levantó ronchas en la minoritaria oposición pero también en la amplia y variopinta base oficialista, formada por partidos de centro y derecha.
La declaración más contundente la dio el presidente de la Cámara de Diputados, Rodrigo Maia, del partido Demócratas (DEM), que apoya al Gobierno sobre todo en su línea económica liberal, aunque toma cierta distancia en otros asuntos, como el combate a la violencia.
"Espero que algunos no defiendan que, si los profesores estaban armados, se habría resuelto el problema", declaró Maia sin citar al mayor Olimpio, y agregó que es necesario "entender que el monopolio de la seguridad pública es del Estado y no una responsabilidad del ciudadano".
Maia fue más allá y criticó a quienes, como la "bancada de la bala", proponen que se permita el porte de armas a los ciudadanos. "Ahí pasamos a una propuesta de barbarie que no debe avanzar en Brasil", sostuvo el presidente de la Cámara Baja.
Sin embargo, el propio mayor Olimpio anunció que en las próximas semanas será conformado otro frente suprapartidario, volcado a promover una enmienda constitucional que legalice el porte de armas, la cual reforzaría un decreto firmado por Bolsonaro el pasado enero, que flexibilizó las normas para la compra de armamento.
Según Olimpio, ese frente estará constituido por unos 300 parlamentarios y trabajará "por la posesión y el porte de armas, que es lo que la población dijo que quiere", cuando eligió a Bolsonaro en los comicios del año pasado.
Si bien el presidente mantuvo silencio sobre ese asunto, uno de sus hijos, el influyente diputado Eduardo Bolsonaro, tomó la palabra y afirmó que el problema no son las armas, sino las personas.
"Las armas no sirven solamente para matar. También sirven para defenderse" y pueden "hacer tanto mal cuanto un automóvil", declaró el parlamentario, que también es miembro de la Policía Federal.
"Quienes matan son las personas, no las armas. Y para eso se puede usar una pistola, pero también una piedra o un cuchillo", dijo el diputado, en aparente alusión al atentado que sufrió su padre en septiembre pasado, en plena campaña electoral, cuando fue atacado con un puñal por un hombre que le causó gravísimas heridas.